Después del verano, para evitar que el frío nos pille por sorpresa, debemos revisar las instalaciones de gas y calefacción para comprobar que todo funciona correctamente. Verificar el buen funcionamiento de la calefacción y radiadores mejorará su eficiencia y supondrá un ahorro considerable en la factura energética. Para ello, no te pierdas esta guía con prácticos consejos para poner a punto la calefacción.
Realizar un mantenimiento adecuado de la caldera, radiadores y demás sistemas de calefacción que tengamos es un requisito indispensable para comenzar el invierno con buen pie. En este sentido, son varios los aspectos que debemos tener en cuenta:
- Aislar convenientemente conductos, chimeneas y tubos de conexión
- Instalación de un termostato inteligente para una mayor eficiencia y ahorro energético
- Purgar los radiadores
- Comprobar la presión de la caldera
- Repasar el estado de las rejillas de ventilación
- Reducir las pérdidas de calor en casa
Aislar conductos
Un correcto aislamiento de conductos, remates de chimeneas y encuentros con tubos nos asegurará el buen funcionamiento de nuestro sistema de calefacción. La cinta es impermeable y lleva una hoja de aluminio en su parte externa y una lámina asfáltica de betún elastómero en la interna. Gracias a esta cinta resistente a la intemperie se consigue sellar, impermeabilizar y proteger contra los rayos ultravioleta.
Para su colocación se han de seguir los siguientes pasos:
- Cortar la cinta según el diámetro de la chimenea o tubo
- Retirar el plástico protector
- Adherir a la superficie. Al ser muy flexible se adapta perfectamente a superficies angulosas e irregulares
Instalación de un termostato inteligente
Un termostato inteligente regula la temperatura de la vivienda de forma remota. Es decir, permite controlar y ajustar la calefacción desde el teléfono móvil o la tablet aunque no estés en casa. De esta forma, podrás subir o bajar la temperatura según sea el día más o menos soleado, o conectarla antes si vas a llegar a casa antes de lo previsto. Además, se estima que el ahorro en la factura energética que supone la instalación de un termostato inteligente puede ser de hasta un 40%.
Para ello, habrá que conectar el hub o relé de caldera y el termostato inalámbrico tal y como se indica en el siguiente vídeo tutorial:
En general, los pasos que se han de seguir son:
- Conectar el hub a los cables de caldera según el esquema o instrucciones. Para ello, resulta muy práctica la multiherramienta 13 en 1 de Wolfcraft, ya que incluye tenazas de puntas, tenazas combinadas, cortador de alambre, hoja de cuchillo y atornillador Phillips, entre otras.
- Descargar la aplicación y conectar el hub con el teléfono móvil y con el termostato inteligente, siguiendo las instrucciones que aparecerán en pantalla.
- Configurar la cuenta y las opciones de climatización.
Purgar radiadores
Cuando los radiadores han permanecido inactivos durante varios meses y se vuelve a rellenar el circuito de agua, es frecuente que se creen bolsas de aire que debe expulsarse mediante el purgado del radiador. Para ello, se seguirán los siguientes pasos con todos los radiadores de la vivienda, empezando por los que estén más cerca de la caldera:
- Comprueba que la caldera está encendida y en posición calefacción/invierno
- Afloja la válvula del radiador y pon debajo un recipiente para recoger el agua
- Mantenlo abierto hasta que expulse todo el aire y ciérralo cuando solo salga agua
Por otra parte, no olvides limpiar con frecuencia la parte exterior del radiador para mantenerlo libre de polvo y en perfecto estado.
Comprobar la presión de la caldera
La presión de la caldera debe estar entre 1 y 1,5 bares según el modelo. Todas las calderas cuentan con un manómetro para controlar la presión, pero hay que tener en cuenta que esta medición se debe llevar a cabo con la caldera fría. Si tras realizar la medición la presión estuviera por debajo de 1, se debe accionar la llave de llenado y cerrarla cuando se alcance la presión adecuada.
Por otra parte, también es importante saber que las modificaciones en las instalaciones o en aparatos de gas se han de realizar por un profesional o por empresas habilitadas.
Revisar las rejillas de ventilación
Las rejillas de ventilación han de estar en perfectas condiciones y sin que ningún objeto o mueble obstruya la circulación de aire, dificultando su funcionamiento. Además, se deben limpiar para eliminar el exceso de polvo empleando alguno de los siguientes métodos:
- Con un paño que no suelte pelusa o con un plumero
- Aspirando con el accesorio para el polvo de la aspiradora
- Utilizando una sopladora de aire comprimido
Si fuera necesario, se puede desmontar la rejilla para una limpieza más profunda.
Localizar y reducir las pérdidas de calor
Una vivienda suele perder calor a través de ventanas y puertas, así como por pequeñas grietas. Por este motivo, vale la pena revisar y localizar estas fugas para mantener por mucho más tiempo el calor que genera la calefacción en el interior de nuestra vivienda. Una forma sencilla de comprobarlo consiste en humedecerse las manos y colocarlas delante de estas zonas. Si notamos frío, es que está entrando aire del exterior y, por tanto, existe una fuga.
Para solucionar este problema se recomienda:
- Instalar burletes en las ventanas y en los bajos de las puertas
- Sellar las juntas de los cajones de las persianas y de los marcos de las ventanas
- Reparar las grietas y sellar las cajas y tomas de enchufes y conexiones eléctricas
- Aislar el techo y el suelo, si fuera necesario
Espero que estos consejos para poner a punto la calefacción te ayuden a mejorar la confortabilidad de tu vivienda y a reducir tu factura energética. Podrás encontrar más guías y trucos sobre bricolaje y decoración en www.bricoydeco.com ¡Gracias por comentar y compartir!
Excelente post, me ayudo mucho el de purgar los radiadores que hacia tiempo que mi casero no lo hacia. Gracias!!