Todos buscamos la forma de reducir nuestros gastos mensuales y una de las principales preocupaciones suele ser la factura de la luz. Con el aumento de la tarifa eléctrica, es más importante que nunca hacer un uso más eficiente de los electrodomésticos para ahorrar en la factura energética. En este artículo encontrarás consejos que puedes poner en práctica de forma sencilla para optimizar el consumo de tus electrodomésticos y reducir considerablemente el importe mensual de tu factura energética.
¿Cómo pagar menos en la factura energética?
El ahorro energético consiste en consumir de manera más eficiente, no solo consumir menos. Algunos consejos clave incluyen elegir electrodomésticos eficientes y hacer un uso inteligente de los que ya tienes en casa. Además, aprovechar al máximo las funciones de ahorro energético que ofrecen algunos electrodomésticos, como los modos de apagado automático o los programas ECO, puede marcar una gran diferencia en el consumo mensual y una reducción en la factura energética.
Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), los electrodomésticos representan alrededor del 25,9% del consumo energético en los hogares. Este porcentaje puede reducirse considerablemente aplicando buenos hábitos de uso y eligiendo tecnologías más eficientes como, por ejemplo, apagar los electrodomésticos por completo en lugar de dejarlos en modo stand-by y realizar un mantenimiento regular para asegurar que funcionan de manera óptima. También es importante usar los electrodomésticos en horarios con tarifas energéticas reducidas, sobre todo si tu contrato incluye discriminación horaria.
¿Cuáles son los electrodomésticos que más electricidad consumen?
Para ahorrar es importante saber qué electrodomésticos son los que más electricidad consumen:
- Frigorífico. Es uno de los electrodomésticos que más consume, ya que funciona las 24 horas del día. Para evitar que su consumo dispare el gasto de la factura se recomienda mantener la temperatura entre 4°C y 6°C y así evitar un consumo innecesario. Además, asegúrate de revisar las juntas de la puerta para evitar fugas de frío que incrementen el consumo energético. Por otra parte, aprovecha la capacidad de almacenamiento del frigorífico, pero no lo sobrecargues para mantener una buena circulación del aire frío.
- Lavadora y secadora. Debes saber que el 80% de la energía que consume una lavadora se destina a calentar el agua. Por ello, siempre que sea posible, usa programas de lavado en frío y seca la ropa al aire libre si las condiciones lo permiten. Además, intenta agrupar la ropa para evitar poner más lavadoras de las necesarias. Un buen mantenimiento de los filtros también contribuirá a maximizar la eficiencia del aparato.
- Horno y microondas. Usar el horno consume considerablemente más que el microondas. Por este motivo, para calentar o cocinar pequeñas cantidades de alimentos, el microondas es una opción mucho más eficiente. Además, el emplear recipientes adecuados, como vidrio o cerámica, puede mejorar la eficiencia del horno. Si necesitas usar el horno, intenta cocinar varios alimentos al mismo tiempo para aprovechar al máximo el calor generado.
Ahora que ya sabes cuáles son tus «ladrones de energía», aplica estos trucos para consumir menos en los electrodomésticos más habituales que podemos encontrar en cualquier hogar:
- Horno: planifica tus menús para aprovechar un uso para varios platos y apaga el horno unos minutos antes de que termine la cocción para aprovechar el calor residual. También se aconseja descongelar los alimentos antes de cocinarlos para reducir el tiempo de uso del horno.
- Microondas: usa el microondas en lugar del horno siempre que sea posible, ya que consume entre un 60% y un 70% menos de energía para tareas sencillas como calentar comida.
- Lavadora: da prioridad a los programas de agua fría y no sobrecargues la lavadora. El consumo aumenta cuando el tambor está demasiado lleno y la ropa no quedará tan limpia.
- Frigorífico: antes de guardar restos de comida, déjalos enfriar a temperatura ambiente, ya que el calor de los alimentos obliga al frigorífico a trabajar más para mantener la temperatura, incrementando así el consumo. Además, descongelar los alimentos en el frigorífico ayuda a reducir el consumo total de energía, ya que el frío generado durante la descongelación contribuye a mantener la temperatura interna del frigorífico de manera más eficiente.
- Lavavajillas: aunque los ciclos ECO son más largos, consumen hasta un 50% menos de energía y un 30% menos de agua en comparación con los ciclos estándar. Utilízalos siempre que sea posible para beneficiarte de este ahorro.
- Secadora: seca la ropa al aire libre cuando haga buen tiempo, ya que la secadora también tiene un consumo energético elevado y la mejor forma de evitarlo es reduciendo su uso al máximo.
Claves para elegir electrodomésticos eficientes
La elección de electrodomésticos eficientes es fundamental para reducir el consumo energético, ya que estos aparatos están diseñados para utilizar menos electricidad y optimizar su rendimiento, lo cual se traduce en un ahorro significativo a medio y largo plazo. Las siguientes recomendaciones te ayudarán a elegir electrodomésticos eficientes:
- Opta por Categorías A o B. Aunque los electrodomésticos más eficientes suelen ser más caros, el ahorro a largo plazo compensa el costo inicial y por ello debe considerarse este gasto como una inversión. Además, ten en cuenta que, generalmente, se estima que el tiempo para recuperar la inversión en un electrodoméstico eficiente varía entre 3 y 5 años, dependiendo del uso y del tipo de aparato.
- Funciones ECO. Busca electrodomésticos con funciones como el modo de ahorro de energía, apagado automático, o sensores que ajusten la potencia según las necesidades.
A partir de 2021, la Unión Europea introdujo un nuevo sistema de etiquetado energético que clasifica los electrodomésticos de la letra «A» (más eficientes) a la «G» (menos eficientes), esta escala se actualiza regularmente para adaptarse a las mejoras tecnológicas. Cada etiqueta incluye una serie de apartados cuyo significado puedes ver en este ejemplo de etiqueta de Eficiencia Energética de una lavadora.
Por otra parte, si sigues estas buenas prácticas podrás maximizar la eficiencia de tus electrodomésticos:
- Realiza un mantenimiento adecuado para garantizar un funcionamiento eficiente y prolongar su vida útil. Por ejemplo, limpia regularmente los filtros de la lavadora, el lavavajillas o el aire acondicionado, ya que se ensucian con el tiempo y provocan obstrucciones que aumentan el consumo energético.
- Descongela periódicamente el congelador porque el hielo acumulado reduce la eficiencia del congelador y hace que consuma por encima de lo habitual.
- Revisa las juntas de las puertas del frigorífico y el horno para asegurarte de que estén en buen estado y evitar fugas de frío o calor.
Espero que estos consejos y trucos contribuyan a reducir tu factura energética. Ten en cuenta que cada pequeño cambio contribuye al ahorro y no olvides que, además de cuidar tu bolsillo, también estarás cuidando el planeta al reducir el consumo innecesario de recursos. ¡Empieza a implementar estos consejos hoy mismo y verás la diferencia en tu próxima factura de luz!
Encontrarás muchas más guías de decoración, bricolaje y eficiencia energética en www.bricoydeco.com ¡Gracias por compartir!